Es uno de los bares mejor escondidos en Buenos Aires. Queda tras una de las puertas oscuras del barrio chino y si no tenes la dirección exacta no encontraras la entrada aun si la pasas caminando.
Al entrar logramos conseguir una mesa al lado de la barra, algo que parece casi un imposible un sábado a las 12 y media de la noche. Eramos muchos y quedamos amontonados pero no nos molesto. Algunos estaban con su pareja otros buscando pero todos estaban presentes. Nos quedamos en Puerta uno hasta las 03 tomando tragos y picando algo. Yo me tome media botella de Cafayate Reserva Torrontes y estaba casi preparando un show sobre la mesa cuando los chicos se decidieron de ir en rumbo a jet.
Pancho decidió hacernos problema en la puerta de Jet. Las chicas entraban sin problema pero los chicos no, algo que yo sigo sin entender. Eran dos chicos bonitos y bien vestidos en camisa y zapatos. Pero, si pancho dice que es no no hay mucho que hacer. Contemple la idea de rogarle ahí enfrente de todos (a que nadie lo haría con tanta convicción que yo) Esto para acentuar lo ridículo de la situación, pero borracha como estaba me dio miedo de no poder pararme de vuelta si decidía tirarme a sus pies.
El grupo termino dividido en dos. Las chicas entraron y los chicos se fueron a tomar algo. Yo ya estaba mas que molesta. Hace casi 4 años que vamos a Jet, jueves como sábado, y aun así nos terminaron haciendo algo así. La verdad es que seguí tomando, y eso bastante, pero el sabor amargo no quiso desaparecer ni con los caipis de maracuya. Yo me termine yendo temprano y con bronca. Las chicas se quedaron.
Es recién hoy que me entero de lo que paso después de que me fui tambaleando de ahí. A una de las chicas le robaron la billetera y a C le trataron de robar, algo que se dio cuenta de cuando vio que alguien había metido dedos en su cartera dejándola abierta.
Hace mucho no escuche algo que me de tanta bronca. No solo nos hicieron problema en la puerta, siendo gente bien y bien vestida pero enzima dejaron entrar chorros. Y cuando las chicas trataron de contarles a los chicos de seguridad lo que había pasado no solamente las ignoraron pero también las trataron como bobas sin aportar nada a la situación. Yo me pregunto, no es la idea tener códigos estrictos en la puerta para dejar entrar gente bien y sacar oportunistas y ladrones?
Estoy enojada. Este episodio solo me comprobó lo que vengo pensando desde hace un tiempo ya; Jet decayó. Por ahora me quedo con Puerta Uno.
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